Chakana certifica su finca Los Cedros
En el mes de celebración a la Pachamama, Bodega Chakana presenta la cosecha 2019 de Chakana Finca Los Cedros Malbec, elaborado con uvas orgánicas provenientes de viñedos propios ubicados en Paraje Altamira, Valle de Uco.
“La 2019 fue una cosecha más fresca y voluminosa de lo habitual. Altamira tiene una mezcla de tanino intenso pero que se muestra de una manera muy sutil. Finca Los Cedros tiene un carácter de frescura muy notorio y, en esta vendimia, todas estas características se vieron resaltadas”, afirma Gabriel Bloise, enólogo de Chakana. “En este tipo de vendimias más frescas hay que darle un tratamiento especial a la uva. Por lo sutil del tanino, se realizaron extracciones más largas. La crianza de Chakana Finca Los Cedros Malbec es una mezcla de piletas
de cemento con toneles. Para conservar esa frescura de la cosecha 2019 se privilegió el uso de piletas de cemento”.
Finca Los Cedros cuenta con 15 hectáreas de las cuales 13 son de Malbec, plantado entre 2010 y 2011 por Chakana, y unos sectores pequeños con pruebas de Cabernet Franc y Grenache. En 2014 se comenzó el manejo orgánico de la finca y en 2017 se obtuvo la certificación. “La concepción general de la finca esta abordada de la misma manera que Ayni, también en Paraje Altamira, y Nuna en Agrelo: entendiendo que
son un sistema complejo, prescindiendo de insumos y buscando crear fertilidad in situ”, explica Facundo Bonamaizón, Ing. Agrónomo de Chakana..
Este 2021 Bodega Chakana comenzó el proceso para la certificación con el seguimiento de Demeter, la organización responsable del control y promoción de los productos de la agricultura biodinámica. “En la cosecha 2019, en Finca Los Cedros se realizaron pruebas de uso de preparados biodinámicos, pero sin certificar. Sólo faltaba ‘formalizar’ incluyéndola en Demeter”, afirma Bonamaizón. “Los principios y valores declarados por esta organización para el entendimiento de la agricultura constituyen la mejor forma para asegurar e incrementar la calidad de uva, su entorno y de las personas que trabajan allí”.
La biodinámica parte de los conceptos fundamentales de la agricultura orgánica y amplía sus alcances convirtiéndose en una agricultura regenerativa que promueve la biodiversidad y un modelo de bienestar que incluye a las plantas, las personas que producen los alimentos y las personas que los consumen. Sus prácticas se conectan con la Pachamama desde su concepción, en un vínculo de reciprocidad.
Finca Los Cedros se convertirá en 2022 en el primer viñedo en Paraje Altamira con sello Demeter. En 2016, la fundación otorgó su certificado para la bodega, los viñedos y vinos provenientes de la Finca Nuna en Agrelo, una de las mayores de Argentina con 80 hectáreas biodinámicas certificadas.
Bodega Chakana es la historia de la búsqueda de una identidad vitivinícola auténtica, original y consciente. Auténtica en cuanto resultado de una enología de mínima intervención, donde la tierra y sus frutos puedan expresarse. Original en cuanto al respeto de cada parcela productiva y de las características de su terruño, lo que otorga un carácter e identidad única. Consciente en cuanto a reconocerse como parte de un sistema integral que involucra, además de la tierra, su ecosistema y comunidades. Y como parte de ese sistema, la responsabilidad de cuidarlo. Los métodos agrícolas, orgánicos y biodinámicos, bajo las distintas certificaciones que guían y avalan, son la mejor garantía para los consumidores de esta filosofía vitivinícola. La filosofía Chakana.
Chakana Finca Los Cedros Malbec 2019 tiene un precio sugerido de $1500 en vinotecas.
Durante todo el mes de agosto el vino tendrá un 35% de descuento en la tienda online de la bodega: http://www.chakanawines.com.ar.
El 1 de agosto se celebra Día de la Pachamama -“Madre Tierra” en quechua- en todo el Noroeste del país. Es una tradición ancestral, la Pachamama es una deidad protectora y proveedora, generadora de vida y símbolo de fecundidad y fertilidad. Los orígenes de este culto se remontan a la época preincaica y las celebraciones y homenajes se extienden durante todo el mes de agosto porque es el tiempo previo a roturar la tierra, para luego poder sembrarla. Parte de la celebración consiste en un ritual en el que se entierra una olla de barro con comida y otras ofrendas, una manera simbólica en la cual el hombre devuelve a la Pachamama lo que ha tomado de ella, con el fin de restablecer la reciprocidad entre el ser humano y la naturaleza.
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